¿Ya te has paseado por Dublín y ahora no sabes cómo pasar los fines de semana? Antes de echar un vistazo a nuestra lista de actividades en la capital, aquí te ofrezco algunas ideas para hacer excursiones por los alrededores de Dublín:
1. Visita Howth
Howth es el puerto pesquero en el que todos quisieramos vivir. La península no sólo ofrece una serie de interesantes paseos, sino también las pequeñas tiendas alineadas a lo largo del puerto que contienen productos atractivos. Pero por sobre todo, hay que destacar que Howth es el único lugar en Dublín donde encontrarás un menú muy variado de pescados! Llevo casi 8 años en Irlanda y todavía no sé cuál es mi restaurante favorito, así que adelante, prueba tú mismo y comparte tu opinión. ¿Quizás el pulpo con tapas de mariscos? ¡Y no olvides alimentar a las focas cuando vayas! El lugar es accesible por DART y buses.
Ir a Howth desde Dublín
¡No hay nada más fácil que llegar a Howth desde Dublín! Todo lo que tienes que hacer es tomar la línea 31 / 31a dirección Howth, o tomar el Dart hacia Howth. Este autobús y el tren pasan por el centro de la ciudad, así que consulta la web hittheroad.ie para obtener información sobre cómo llegar a una estación o a una parada desde tu ubicación en Dublín.
2. Visitar Malahide
Al final del recorrido del DART al norte hay una ciudad con un castillo. Esa ciudad es Malahide. Bordeado por el Mar de Irlanda (por supuesto, estamos en una isla), el castillo y su parque adyacente son la excursión ideal para los amantes de la historia y la naturaleza, para los domingos familiares con picnic y sombrilla. Puedes comprar tus entradas aquí.
Ir a Malahide desde Dublín
Para llegar a Malahide desde Dublín, la opción más fácil y rápida es el tren DART. Al igual que para ir a Howth, puedes coger este tren desde una de las estaciones cercanas al centro de la ciudad. Toma el DART en dirección a Malahide y te dejará a dos pasos del castillo.
3. Visitar Glendalough
¿Te han vendido una imagen de Irlanda verde y montañosa, pero hasta ahora sólo has visto los adoquines de Temple Bar? Pues entonces sal y dirígete a Glendalough. En el fondo de este valle que forma la Cañada del Imaal hay una abadía y dos lagos cuyos colores reflejan las paredes boscosas de las colinas adyacentes. Se puede acceder a él por carretera o por tour-operador. Te aconsejo alquilar un coche para disfrutar de los numerosos paseos en medio de la naturaleza a tu disposición.
Ir a Glendalough desde Dublín
Para llegar a Glendalough, no hay ninguna opción mejor que las demás. A menos que tengas un coche, la manera más fácil es tomar un autobús privado que vaya directamente al lugar sin tener que tomar un taxi (www.glendaloughbus.com). También puedes tomar un autobús público (buseireann.ie) a Wexford y parar en Rathdrum, o abordar el tren a Rathdrum. Una vez allí, tendrás que irte en taxi hasta tu destino final (cuesta entre 14 y 18€). Finalmente, si quieres hacer tu vida más fácil, podrías buscar por un tour-operador que se encargará de hacerlo todo por ti. 🙂
4. Visitar Powerscourt
Antigua propiedad de Richard Wingfield, vizconde de Powerscourt, en nombre del rey Jorge IV, el castillo de Powerscourt al sur de Dublín es un magnífico ejemplo de arquitectura paladiana del siglo XVIII. El parque es absolutamente hermoso en verano. Los jardines, la pendiente y las numerosas esculturas no están lejos de recordar a un pequeño Versalles. El jardín japonés también merece una visita. También cabe destacar la cascada de Powerscourt, apreciada por los dublineses que vienen aquí con sus familias para un picnic de fin de semana (a pesar del precio algo exorbitante de la entrada…).
Ir a Powerscourt desde Dublín
Para llegar al castillo de Powerscourt, simplemente toma la línea 44 hasta la parada del pueblo de Enniskerry en el condado de Wicklow (toma el autobús al centro de la ciudad, ve a hitttheroad.ie para ver cuál es la parada más cercana). De lo contrario, aquí encontrarás un tour organizado con una visita gratuita de la ciudad de Dublín incluida.
5. Visitar Kilbeggan
Las aventuras dan sed, en eso estamos de acuerdo. Entonces, si la ciudad te fatiga, ¿por qué no irte en coche o en autobús Eireann hasta Kilbeggan? El pueblo no tiene mucho que mostrar excepto por una de las destilerías más antiguas de Irlanda. La destilería de Kilbeggan (casa Locke) ofrece una visita histórica particularmente interesante, a años luz de las dos fábricas de Bushmills y Jameson en el norte y el sur de la isla respectivamente, pero mucho más auténtica. Siéntete libre de probar el Poitín, ¡Después me contarás qué tal estuvo!
Ir a Kilbeggan desde Dublín
Para llegar a Kilbeggan, o más bien a la famosa destilería del pueblo, puedes coger una de las muchas líneas de autobús que pasan por allí. Para ello, recomiendo la herramienta GetThere.ie para explorar todas las posibilidades a tu alcance (a menos que vayas en coche, por supuesto).
6. Visitar Drogheda, el valle del Boyne
Un poco más al norte, a 40 minutos en coche de Dublín se encuentra el valle de Boyne. Si tuviésemos que mencionar la cuna cultural de Irlanda, indudablemente tendríamos que señalar este valle. Desde los primeros celtas que construyeron las gigantescas pirámides de Newgrange y Knowth hasta las batallas entre orangistas y católicos en el siglo XVI, el valle de Boyne es el equivalente irlandés del valle de Luxor. Con un monumento cada diez kilómetros, la visita a este valle es absolutamente esencial para todos los amantes de la historia irlandesa.